Bueno, varios peros, aunque al menos comenzaremos por definir ANS entre las distintas áreas, esto será un primer paso para llegar más tarde al BSC. Claro que no son lo mismo, pero es bueno que los controles operativos se alinien con la estrategia de la compañía.
Sin emabargo, encontré entre mis cachibaches de la U. de los Andes una advertencia, los riesgos de un BSC:
- Esfuerzo vano, si se trata de un modelo poco elaborado y sin la colaboración de la dirección. Si el “mensaje” no viene desde arriba entonces no hay nada más que hacer ni decir.
- Pérdida de virtudes, si los indicadores no se escogen con cuidado porque no comunican el “mensaje” que se quiere transmitir. Indicaros demasiado complejos tampoco sirven.
- Contraproducente como sistema de control clásico, si la estrategia aún está en evolución, en tal caso es mejor usarlo cómo un método de aprendizaje.
- Y el más clásico de todo, lo “mejor” es enemigo de lo “bueno”, entonces, tratar de alcanzar el BSC perfecto puede llegar tarde y ser inútil.
El Sibarel