Despues de haber estudiado tantos años de todo cuanto hay en los misterios me quedo en el punto ecléctico de todos ellos, en aquello que tienen de común y que como tal es una verdad comprobable.
Las reuniones o encuentros de personas con llevan es forma natural al intercambio de energías y da lo mismo el nombre que le quieran dar a este fenómeno.
Si el encuentro humano es desordenado, cada cual con sus propias ideas y objetivos multiples, entonces el resulado será como el ruido blanco, o la luz blanca, es decir una mescolanza de todo, un salpicón nada más.
Si hay posiciones antagónicas, entonces se libra una verdadera batalla y podemos sentir un agotamuento extremo.
Pero si todos estan es sintonía y según sea su distrbución espacial se puede generar más energía, se puede provocar un efecto de espiral energética positiva que gira y gira, que embriaga a los presentes.
Esto es lo que algunos llaman Espíritu Santo? Esto es lo que buscaba el Vril, como el lado oscuro de la fuerza o los ocultistas satánicos? Sea lo que sea el nombre que le quieran dar es muy real y poderoso, efectivamente podrán bailar por tal embriagamiento, podrán hablar en lenguas, un galimatías nada más propio de estar funcionando en un mayor nivel vibracional pero que para alguien entrenado puede llevar a algo más. A caso la escritura automática de los surrealistas no era fantástica?
Todo es energía, esto lo sabemos desde Hermes, la mecánica cuántica también lo entiende, que falta entonces para que nosotros nos hagamos cargo de esta realidad?
El Sibarel, teosofo unificado de oriente, occidente, norte y sur
