martes, julio 16, 2013

Como un pañuelo de seda

Lo que me fascina del Go es la inmensa fortaleza de sus principios simples.
En esta partida las blancas deben asegurar su territorio y en el camino provocan una inmensa debastación de las negras que debieron retirarse de esa zona antes del combate :-)
Una mirada holística debió ser suficiente para que negro entregara el territorio, total queda mucho tablero por jugar.

El pañuelo de seda no parece un arma pero en el aire la espada más afilada no le puede cortar, y con el mismo se puede extrangular.

El Sibarel, larva de goban