sábado, julio 27, 2013

Haz en mi perfección

De las 3 jaculatorias esta es a mi juicio la más relevante, es la que produce la transformación.
Drigida al Dios Amor, pide desarrollar toda la acción del más puro amor en beneficio de uno mismo, pero resulta que al hacer esto se lograr el despertar y el desarrollo natural de nuestros dones y por tanto volvemos al camino de nuestro destino, volvemos al plan, y así todos ganamos.
El despertar de la kundalini en el pasado lejano permitió el desarrollo del libre albedrío y construir así nuestro propio plan provocándose así una dicotomía en relación al destino.
La cuarta faceta provoca la unidad, trae coherencia y permite realizar simultáneamente nuestra voluntad y la voluntad de Dios, hacer que la elección de nuestro camino vuelva a estar en sintonía con el Plan.

Light Sibarel, en el Camino