Cuando estudié Control Automático en la Universidad aprendí que era necesario un lazo de realimentación para poder ejercer un buen control. Este principio funciona a modo consciencia, o de tomar conocimiento del resultado del ejercicio del control y luego tomar una decisión inteligente al respecto.
Por ejemplo, supongamos que tenemos un contenedor de agua con una llave que vierte agua en él y otra por la que se vacía. El objetivo del control es mantener el nivel del agua en una posición dada, este es el lazo de realimentación. Si el nivel baja hay que decidir si aumentar la llave de entrada y/o cerrar la llave de salida. Si el nivel sube, la decisión será la opuesta, cerrar la llave de entrada y/o abrir más la llave de salida.
En realidad estas decisiones dependen también de las restricciones operacionales de las llaves, cuanto caudal pueden abrir o cerrar. Por lo que para que este sistema pueda funcionar de modo correcto, sin colapsar, se requiere un buen control y que las restricciones operacionales sean compatibles entre sí y la realidad del contenedor.
Este ejercicio hoy se resuelve con informática, pero no es necesario una IA, es algo mucho más simple, que tiene una consciencia muy simple y una inteligencia básica a nivel de código. Pero antes de las computadoras, esto también se podía resolver de modos analógicos y mucho antes, de otras formas mecánicas, que de una u otra forma tenían un mecanismo de consciencia incorporado y una inteligencia "alambrada".
Como vemos estos principios de consciencia e inteligencia básica no suponen un ser vivo en sí, pero necesariamente fueron fruto de uno que sí fue capaz de armar este tipo de control.
Bueno, el punto es que el Cosmos es sin duda un sistema muy bien organizado y que responde a un fabuloso sistema de control que está basado en leyes universales, constantes que le determinan y restricciones (un contenedor infinito de agua con infinitas llaves de entrada y salida, entendiendo por infinito algo que sobrepasa nuestra capacidad para contar y entender). Con todo eso, funciona de maravilla, por tanto es evidente que existe una consciencia universal al respecto y también una inteligencia universal.
Esto podría ser al estilo analógico o mecánico, es decir, como una consecuencia de la propia naturaleza en su poiesis, pero si este fuera su origen y dadas sus características universales, no podemos menos que apreciar su omnipresencia, omnisapiencia y omnipotencia universales, por lo que una Conciencia e Inteligencia con estos atributos, para mí es Dios, por mucho que no fuera un ser vivo propiamente tal.
Lo anterior es lo mínimo que podría deducir, pero si en el ejemplo del control del agua, el sistema de control, con su consciencia e inteligencia no era necesariamente un ser vivo, era igualmente evidente que uno que si lo fue era el responsable primero.
Por tanto este Dios, a modo de sistema de control universal e infinito que le ha dado, le da y sigue dando Orden al Universo, si no fuera en sí mismo una entidad viva, deberíamos aceptar que por analogía es fruto de una que sí lo es, porque ella sí sería propiamente tal Dios y por tanto no podría dejar de existir. En cuyo caso no queda más que concluir que son el mismo Dios.
Por tanto, la existencia del Universo, como un Cosmos, es en sí misma la prueba de la existencia de Dios y pretender comprender más allá excede sin dudas nuestra propia consciencia e inteligencia finitas.
Sibarel
